Con la intención de preservar las costumbres de nuestro país, la Jefatura de Bibliotecas de Tulancingo, realiza los talleres Rescatando Nuestras Tradiciones, de los cuales los sabatinos comienzan con éxito, en tanto que continúan las inscripciones para los que se desarrollarán los días 23, 24 y 25 de este mes, de 3:00 a 5:00 de la tarde, y en la edición 47 de Tulancingo Lector, les daremos más detalles.
Además, les recomendaremos algunos de los libros que se pueden consultar para la ya cercana temporada en la que se conmemora Días de Muertos.
Uno de los títulos con los que se cuenta en las estanterías, de la colección infantil es: Muertos… ¡pero de gusto!, de Emilio Ángel Lome, en el que encontraremos temas como: El culto a los muertos en el México prehispánico, Ceremonias prehispánicas, los muertos en su viaje al inframundo, Preparativos para la celebración del Día de muertos, Ofrendas y altares de muertos, Adorno de tumbas y panteones, La celebración de los pequeños difuntos, Gastronomía, Creencias y arte popular, Cantos y juegos, dichos, refranes y ocurrencias sobre el buen morir y el mal morir.
Y podremos encontrar distintas maneras de nombrar la muerte; La calaca, la catrina, la dientona, la huesuda, la parca, la tilica y la pelona, entre otros.
Les recordamos que sábado 14 y 21 de octubre, de 10 a 12 horas, se realiza el taller en las bibliotecas; Sor Juana Inés de la Cruz, Huapalcalco y Rosario Castellanos, y si deseas participar en la segunda sesión, aún puedes anotarte. Todos los servicios que se ofrecen en las estanterías, son gratuitos.
Otro ejemplar, también de la colección infantil, disponible para usuarios, es: Los huesos sagrados, versión de Judy Goldman; “Es una leyenda que los aztecas les contaban a sus niños para explicarles cómo y por qué sus dioses crearon a los hombres y a las mujeres. ¿Sabías que lo intentaron cuatro veces sin lograrlo?. En las páginas de este libro, te enterarás de cómo, por fin, lo consiguieron.”
Retomando los cursos, niñas y niños de entre 6 y 12 años de edad, escucharán y realizarán narraciones orales, aprenderán a elaborar rosetones de calaveras con hojas de color, papel picado y flores de cempasúchil, entre muchas manualidades más que tienen preparados los bibliotecarios.
Además de escuchar leyendas, aprender a escribir calaveritas literarias, conocer el significado de los elementos que conforman los altares, por ejemplo; flor de cempasúchil, que de acuerdo al primer libro que comentamos, es la más común e indispensable en cada altar y ofrenda dedicada a los adultos, y es considerada la luz que ayuda a las almas a no perder el camino.
En tanto que las flores blancas, con base en el mismo acervo, simbolizan la pureza y la ternura, generalmente se colocan en los altares y ofrendas dedicadas a los niños; el copal, que es una resina de árbol, se utiliza como incienso, y se dice que el humo purifica o limpia el lugar donde se ubica el altar. También se cree que sirve para ahuyentar a los malos espíritus, y, así, el alma pueda encontrar su casa sin ningún peligro; comida, su objetivo es deleitar a las almas que nos visitan.
Resalta también que el 31 de octubre, se prepara el altar y ofrenda dedicada a los niños, y el uno de noviembre se despide a los menores, se da la bienvenida a los adultos, por lo que hay cambios en los altares y ofrendas.
Para concluir, recomendamos de igual manera el título: La muerte pies ligeros, de Natalia Toledo y Francisco Toledo, cuya historia está escrita en zapoteco y español, así como Nos vamos de fiesta, de Marina Rodríguez Bailo, que pertenece a la colección SEP Centenaria, trata de las celebraciones llenas de color en las que los distintos pueblos muestran lo mejor de su cultura y tradiciones. El libro comparte cómo son las festividades, así como su música, bailes, trajes típicos, juegos y platillos tradicionales en: México, Estados Unidos, Ecuador, Brasil, Irlanda, España e Italia.
Los esperamos en las ocho estanterías de Tulancingo, donde todos los días se desarrollan actividades de fomento a la lectura.